Jeremías 32.17 : “ « ¡Oh Señor Soberano! Hiciste los cielos y la tierra con tu mano fuerte y tu brazo poderoso. ¡Nada es demasiado difícil para ti! "
Oremos para que la comunidad Sikh Sani experimentante el poder de Dios de una manera que los bendiga, generación tras generación.
(Esta historia ilustra las verdades acerca de este grupo de personas).
El anciano Sikh Sani se sentó en el porche de su casa y pensó en sus días de gloria. Había sido soldado y había ayudado a un defensor de las fronteras de la India contra Pakistán durante las guerras de 1965 y 1971. Provenía de una familia con una trayectoria de servicio militar distinguida; su padre había luchado por la India en 1947 durante la guerra de independencia. Ahora era viejo y solo podía esperar la muerte. A menudo pensaba en el pasado porque el presente no le ofrecía ningún sentido.
Los Sikh Sani viven en las montañas de la India. Son descendientes de algunos de los primeros reyes de la India. El rey Porus, que derrotó a Alejandro Magno, era un Sikh Sani. Hoy esta casta hace mucho más que luchar por la India. Los Sikh Sani también son agricultores, empresarios y científicos. La mayoría de los miembros del grupo étnico Sani son hindúes o sijs. Hay muy pocos seguidores de Cristo entre ellos, si es que hay alguno.
Pidamos a Dios que dirija una agencia misionera para llegar a los Sikh Sani, llevando a sus familias e hijos a ser bendecidos espiritualmente y dando gracias al Dios Viviente. Oremos para que hagan discípulos que harán más discípulos.
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