Juan
1.1:
“En el principio la Palabra ya
existía. La Palabra estaba con Dios,y la
Palabra era Dios.”
Oremos para que el peso
espiritual de este versículo dirija a todos los sijs hacia el Salvador de todas
las naciones.
(Esta historia ilustra las verdades sobre este grupo de personas).
Diawak, un hombre sij Tarkhan, había sido carpintero. Más
tarde fue dueño de una empresa de construcción y vivió en una casa
grande. Tenía más dinero del que sabía qué hacer, pero el dinero no lo
había llevado a la felicidad. Había un espacio vacío en su corazón, y
ningún sistema religioso podría llenarlo.
Los Sikh Tarkhan son uno de los grupos de personas más ricos de la
India. Hace miles de años, eran una casta de carpinteros. Hoy en día,
algunos miembros de este grupo de personas dominan la industria de la
construcción de la India. Otros miembros de este grupo de personas se han
incorporado al ejército de la India. En 1971, los soldados y oficiales de
Sikh Tarkhan ganaron una batalla clave en la guerra contra Pakistán. La
mayoría de los miembros de este grupo de personas son hindúes, aunque también
hay una minoría sij considerable entre ellos. Los sijs tienen una buena
base porque adoran a un Dios de la creación, y su libro sagrado incluye una
hermosa colección de canciones de adoración al creador.
Oremos para que muchos ancianos Tarkhan Sikh comprendan que
Jesucristo es el Verbo hecho carne. Pidamos a Dios que levante obreros
fieles que se acerquen a los sij Tarkhans con el mensaje de salvación que
llevará a toda su comunidad a ser bendecida por Cristo.
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